Autor: admin - Categoría: General - Etiquetas: alergias, babeo, fiebre, hinchazón, insectos, nerviosismo, oruga del pino, oruga procesionaria, paseos, peligros, problemas oculares, reacciones cutáneas, toxina, veterinario, visitar al veterinario, vómitos - Comentarios: 0 comentarios
En esta época del año, debemos prestar especial atención para prevenir que nuestros perros tengan contacto, laman u olisqueen la indeseable Oruga Procesionaria del Pino, oruga muy llamativa, de color negro con pelos de tonalidad naranja que lanza como dardos envenenados por una toxina si se siente amenazada.
Se desplaza unida a otra u otras a modo de “procesión” formando una línea en movimiento. Debido al cambio climático, estas orugas cada vez son más frecuentes, y durante largos periodos de tiempo, en las calles de nuestras ciudades donde haya pinos, así como en parques por donde habitualmente paseamos. Por suerte, nos resultará muy fácil reconocerlas.
Estos insectos, son muy peligrosos tanto para las personas como para los animales, producen reacciones cutáneas, alergias e incluso problemas oculares de máxima gravedad. Los perros pueden mostrar síntomas como hinchazón interna y externa de la boca y lengua, garganta, babeo constante, mucho nerviosismo e incluso fiebre y vómitos.
Si no actuamos con rapidez, las consecuencias pueden ser extremadamente graves. Si observamos alguno de los síntomas anteriormente detallados y tenemos sospechas de posible contacto con estas orugas, podemos lavar la zona afectada de nuestro perro con agua caliente (no hirviendo) mezclada con vinagre, de este modo evitaremos que la toxina haga más daño durante el tiempo que tardemos en llegar a la consulta de nuestro veterinario, que procederá con el tratamiento específico para estos casos.