Es importante enseñar a un perro a “ir al baño”. Tanto si se trata de un cachorro como de un adulto.
Convivir con un perro que no ha aprendido a orinar o defecar fuera de casa puede ser un problema. Para saber cómo enseñar a un perro a hacer sus necesidades fuera de casa, o bien en un lugar concreto, hay que tener muy claros los siguientes puntos:
Para enseñarle lo importante es tener mucha paciencia y perseverancia. Durante todo el proceso de aprendizaje, tenemos que estar muy atentos al perro y supervisar su comportamiento para intuir y anticipar cuándo tiene ganas de orinar o defecar. La supervisión es la primera instrucción a seguir. Es imposible enseñar a un perro a hacer sus necesidades en la calle o el jardín si no estamos con él cuando orina o defeca.
Por norma general, los perros suelen tener cierta rutina a la hora de hacer sus necesidades. Estos tres momentos son muy propicios para que un perro tenga ganas de orinar o defecar:
- Después de comer
- Después de dormir toda la noche
- Después de jugar
La idea es estar muy atentos durante todo el proceso de aprendizaje y sacar al perro a la calle, al jardín o llevarlo a la zona destinada como “baño”, inmediatamente después de dormir, de comer o de una sesión de juego activo.
Si nuestro perro recibe un premio cada vez que hace sus necesidades donde le pedimos, pronto aprenderá que le compensa más hacerlas allí que en otro lugar. Por tanto, si nos preguntamos cómo enseñar a nuestro perro, el refuerzo positivo es un método muy eficaz. Los premios utilizados pueden ser desde golosinas para perros hasta pedacitos de algún alimento que le guste al can o caricias y palabras cariñosas. Hay que escoger el tipo de refuerzo que más motiva a nuestro perro. Algunos preferirán un premio comestible pero otros estarán encantados si, simplemente, les propiciamos un rato de mimos.
Cómo enseñar a un perro si es un cachorro
En el caso de los cachorros, no debemos ser demasiado exigentes. Además, para asegurarnos de que no le estamos exigiendo al cachorro que aguante sin ir al baño más rato del que es capaz, debemos tener la siguiente regla clara: Un cachorro es capaz de aguantar un número de horas igual a los meses que tiene, más una. O sea: si tiene 4 meses, no le pidamos que aguante más de 5 horas (4 + 1). Estos aspectos son importantes a tener en cuenta para saber cómo enseñar a un perro a ir al baño si se trata de un cachorrito.
Enseñar a un perro a hacer sus necesidades en la calle quiere decir asumir la responsabilidad de que vamos a proporcionarle al animal el suficiente número de salidas para que pueda evacuar cuando lo necesite. Es imprescindible mantener un rutina mínima de salidas, de manera que el animal pueda prever que podrá orinar o defecar. Será imposible enseñar a un perro a evacuar en la calle si un día lo sacamos y otro no. Se recomienda, además, mantener horarios estables en la medida de lo posible.
Fuente Nutro. ( Editado)